Escritoras madrileñas
Como suele decirse, en Madrid hay de todo. Y de ello es muestra esta colección de textos de las nueve autoras escogidas. Desde una diversidad de fondo y forma se adivinan búsquedas de toda índole (de identidad, de memoria, de espacio, de la sexualidad, etc.) en este compendio que recoge fragmentos de novelas, relatos e incluso unos diarios, curiosamente de la mano de la más joven, con frases como: “Cada cual busca lo que ha encontrado alguna vez”, que hacen también alusión a loshallazgos.
Son periodistas, filólogas, lingüistas, profesoras, escritoras, pero, a través de sus textos, se desprende mucho más de todas ellas: incertidumbre, riesgo, resistencia. Parece que hacen de la escritura el hogar. Realidades cambiantes, orilladas, no han tenido nunca tanta voz como ahora. Intuyo que Madrid está presente en todas las ficciones, incluso en aquellas que son el resultado de una huida fuera de la ciudad.
En el imaginario colectivo, Madrid son idas y venidas, lo que vemos al pasear por sus calles, lugares de paso: un cine, una librería, un restaurante, la noche en una casa ajena —momentos cruciales para el recuerdo—. Referencias —el Reina Sofía, el Paseo de la Castellana, la estación de Atocha, Doctor Esquerdo—, conversaciones en todos los idiomas, estados de ánimo. También una ciudad inmensa y veloz donde no nos enteramos de las cosas que ocurren justo a nuestro lado, tras la puerta del vecino, en el colegio del barrio: manifestaciones que suceden realmente y no por televisión, y por ello parece que todo te aborda directamente. Preparar la comida o calentarse y resguardarse del frío hace que nos recuperemos un poco. Mientras tanto, la vida discurre por otros derroteros. Algunas de estas escritoras se marchan —porque ya se sentían extranjeras—, y escriben desde otras ciudades y países o de otras ciudades, pueblos y países, que es seguir hablando de lo que no entendemos, haciendo tentativas para lograr un lenguaje con el que sentirnos identificadas.
Por lo que a mí respecta, ha sido un placer convocarlas, imbricarlas, situarlas unas al lado de las otras.
© María Cabrera para TBR 2018
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